Los cuadernos prestados tienen las proporciones ideales para ser un artículo promocional eficaz en eventos o ferias comerciales. Al regalar cuadernos personalizados expresivos, las empresas pueden asegurarse de que el evento esté vivo incluso si ha terminado hace mucho tiempo. Los cuadernos son útiles para los participantes, ya que proporcionarán formas de trabajar durante el evento, es decir, una vez que los asistentes obtienen algunas ideas, pueden registrarlas o durante los seminarios, los asistentes pueden tomar notas, o cuando surgen nuevas ideas, los asistentes pueden dibujarlas. El atractivo estético y funcional de los cuadernos personalizados garantizará que la marca allane el camino para el éxito mucho después del evento.
El beneficio más obvio de usar cuadernos como obsequios es que muchas personas definitivamente los necesitarán a nivel personal o profesional. El uso universal de un cuaderno lo hace ideal para llegar a diferentes audiencias, incluidos clientes, socios comerciales o incluso futuros colaboradores en proyectos. Con su logotipo, marca, eslogan o cualquier otro mensaje colocado en la superficie del cuaderno, sus clientes objetivo tienen un fácil acceso para ver su negocio con regularidad.
Hay otros obsequios que se pueden usar en lugar de cuadernos, pero son baratos y voluminosos, lo que no es ideal para grandes eventos. Pueden distribuirse en stands, paquetes de bienvenida a los participantes o incluso a los ponentes y a las personas importantes del evento. Los diferentes diseños que puedes utilizar en los cuadernos te permiten incorporar los cuadernos a la temática o al branding del evento, dándole un aspecto uniforme y saludable.
Además, los cuadernos personalizados son una excelente manera de dejar huella. Si sucede que los visitantes siguen usando el cuaderno después del evento, siempre pensarán en su negocio y es probable que se ocupen de usted en los próximos momentos. Por lo tanto, al comprar cuadernos personalizados para su próximo evento, se asegura de que la presencia de su marca permanezca durante meses e incluso años después de que el último visitante se haya ido.